¿Está buscando un aliado para su pequeña empresa?
Está a punto de terminarse un año lleno de incertidumbre, de desesperanza, de malestar, el año de Covid 19, ya que ninguna crisis anterior ha generado más miedo ante el futuro que la Pandemia. Sin embargo, toda crisis viene acompañada de oportunidades, oportunidades que buscamos compartir con las empresas colombianas en busca de la esperanza de un mejor año por venir. Por esto nos hemos comunicado con los empresarios, preguntándole cuáles son sus mayores temores, y que temas quisieran explorar al respecto y entre ellos una mayoría de respuestas indicaron interés por entender que es y cómo aplicar la disciplina financiera. Luego, si diariamente se pregunta, ¿de dónde va a recibir soporte para seguir adelante? ¿cómo afrontar el mañana? Queremos compartirle nuestra experiencia de la importancia de la disciplina financiera, de cómo el adoptar este habito convierte a la empresa en su mejor aliado para seguir adelante. Desde CCxC, su aliado confiable, lo apoyamos trabajando juntos, ofreciéndole nuestras herramientas, compartiendo nuestras experiencias.
Empecemos por preguntar, ¿qué es la disciplina financiera? No hay una respuesta exacta, pero en principio es una verdad simple: para ser financieramente responsable, la empresa debe operar dentro de sus posibilidades. Y para operar dentro de sus posibilidades, debe gastar menos de lo que le ingresa. Por ello, la disciplina financiera se refiere a qué tan bien se pueden ajustar los gastos y ahorros de las empresas para triunfar. Sabemos que es muy fácil decirlo, y mucho más complicado hacerlo, por lo cual le compartimos unas guías simples.
La primera guía es establecer un plan, un plan de orden en el manejo del dinero para la administración responsable del dinero de la empresa. Al crear un plan, se observan las metas a corto y largo plazo que se tiene, ya que el propósito del plan es asegurarse de tener dinero para llevar a cabo las metas más importantes para la empresa. La cuantificación de este plan es a través de un presupuesto de gastos, lo cual implica un cuestionamiento básico, ¿conoce los gastos que realmente necesita hacer? Dándole prioridades a las metas de corto y largo plazo se puede establecer cuáles son los gastos prioritarios para lograrlas y eliminar aquellos que son irrelevantes. La manera más efectiva para desarrollar un presupuesto es apoyándose en cifras reales para entender como presupuestar los gastos, es decir los gastos se cotizan, se revisan las facturas, se leen los contratos. Aunque los presupuestos se basan en estimados, solamente aquellas cifras estimadas, soportadas por cifras reales le darán validez al presupuesto. Por lo tanto, el desarrollo del presupuesto va de la mano con el control de gastos, es decir con entender sus gastos, y la mejor manera de saber que se entienden los gastos es convirtiendo los gastos irrelevantes en fondos de ahorro. La eliminación de los gastos innecesarios de hoy se convierte en los ahorros de mañana.
¿Paga a tiempo sus deudas? La morosidad puede ser el peor enemigo del buen nombre de la empresa. Un presupuesto que identifica los gastos claves se complementa con un horario de pagos. Cada gasto tiene su fecha de pago correspondiente, luego identificando las fechas de pagos se puede planear de donde se obtienen los fondos para cubrirlos. Si se puede negociar las fechas de pago con los proveedores, apoyándose en el presupuesto de gastos y en el horario de pagos, se planea el uso eficiente del efectivo. Entender el uso responsable del dinero conlleva apoyarse en ayudas claras, no significa hacerlo solo.
¿Tiene deudas con Tarjetas de crédito? El pago disciplinado de estas es clave para organizarse. Enfocarse en pagar únicamente el pago mínimo de las tarjetas de crédito se puede convertir e n un paso en la dirección contraria. Si solo se paga el mínimo, inconscientemente se está enfocando en gastar más de lo que se puede, se acumula una deuda que después puede traer problemas. Ponerse una meta de pago superior al pago mínimo, buscar ampliar esta meta de pago cada vez que se pueda, y ponerse un límite en el tiempo para pagar el saldo total de la deuda en la tarjeta de crédito, son los pasos hacia la responsabilidad monetaria. Limitar el uso de la tarjeta para compras específicas, convirtiendo la tarjeta de crédito en un instrumento de uso específico para necesidades claves, es entender el verdadero uso de la tarjeta de crédito como un apoyo en el desarrollo de la empresa, no como el dinero fácil de usar para adquirir cosas nuevas, innecesarias permanentemente. Además, las tarjetas de crédito son muy útiles en casos de emergencia, pero esto solo funciona si tiene el cupo libre porque mantiene un pago organizado de los saldos.
¿Piensa en pedir un préstamo? Un préstamo como una fuente de fondos para lograr una meta importante que le va a generar beneficios futuros identificados para la empresa, puede ser una gran ayuda, pero únicamente si se cuentan con los fondos para pagarlo. ¿Le parece ilógico? ¿Quién va a pedir un préstamo si tiene los fondos para pagarlo? Si se solicita un préstamo sin haberse planeado como conseguir los fondos para pagarlo se está entrando en una trampa mortal para la empresa, para ello se necesita entender la generación de ingresos y el flujo de efectivo de la empresa. Los prestamos son dineros que no le pertenecen a la empresa, le pertenecen a quien hace el préstamo, y por lo cual generan intereses. Es decir, quien le otorga el préstamo a la empresa le exige un costo adicional por permitirle a la empresa aprovechar el uso de un dinero que no le pertenece. Por lo tanto, cuando se toma un préstamo se debe tener claridad de cuanto es el costo adicional en el cual se está incurriendo, se deben entender los términos del tiempo y cuota a pagar, de las condiciones de castigo si no se paga a tiempo, o a veces de si se paga antes de tiempo. Un préstamo que se incumple, le puede significar perder el colateral o garantía de pago, el dañar el nombre de la empresa, el perder la seguridad del futuro. Por eso, antes de solicitar un préstamo es importante asegurarse de que el costo en el que se incurre al tomarlo es menor que el beneficio esperado, pero, sobre todo, en que está en condiciones de pagarlo. Los prestamos son una herramienta de ayuda para cubrir una meta que le va a generar beneficios futuros, si el préstamo se solicita solo porque se cree que es una herramienta para que la empresa sobreviva, se puede convertir, por el contrario, en la herramienta que elimina la supervivencia de la empresa.
¿Finalmente, se pregunta por qué le decimos que la disciplina financiera es un aliado esencial para la empresa? Porque la disciplina financiera tiene sus recompensas. De acuerdo con estudios mundiales basados en el éxito de muchas otras pequeñas empresas, se puede concluir que adoptar hábitos de disciplina financiera ha llevado a estas empresas a mejores resultados comerciales. Igualmente se concluye que operar dentro de las posibilidades de la empresa, y el asegurarse de tener el dinero para las cosas en las que realmente necesita y puede gastar, reduce los niveles de estrés en el trabajo y mejora los desempeños. Finalmente, la disciplina financiera es la herramienta para “poner la casa en orden” ya que provee el conocimiento para acertar en los números buscando ganar más de lo planeado, gastar menos de lo necesario, y ahorrar tanto como sea posible. Cuando se logra el equilibrio adecuado entre gasto y ahorro, es muy probable que la empresa crezca tanto o más de lo que se aspira.